Un año más, desde la PPIINA llamamos la atención sobre el llamado Día de la Madre que se celebra este domingo 2 de mayo. Ese día en el que las madres se ven colmadas de atenciones, felicitaciones y regalitos, pero no se ven aliviadas de la sobrecarga que soportan.
La PPIINA tiene un mensaje desde su fundación: «En el día de la madre, lucha por un futuro igualitario, con responsabilidades compartidas… ¡y déjate de planchas!»
Ahora más que nunca, cuando las mujeres estamos exhaustas supliendo los cuidados que el sector público abandona y los hombres no comparten; cuando se ha disparado nuestra precariedad, pobreza y sobre-explotación; cuando todo nos empuja a soportar situaciones de violencia machista de las que cada vez tenemos menos medios para salir, seguimos diciendo: ¡permisos igualitarios para la corresponsabilidad sí; sobrecarga de las madres no!
¿Qué hacen los gobiernos, tanto de la Nación como autonómicos, para que se repartan equitativamente los cuidados entre hombres y mujeres? ¿Qué prometen los partidos? Como muestra, basta ver los programas para las elecciones del próximo 4M en la Comunidad de Madrid.
Los partidos de la derecha y fascistas hablan de «proteger la maternidad», pero lo que pretenden explícitamente es impedir el derecho al aborto y reducirnos de nuevo a nuestra supuesta «tarea natural» de cuidar en solitario y aguantar la violencia machista. Es crucial hacer frente a esa amenaza inmediata.
Pero tampoco podemos seguir tolerando la situación actual. Los demás partidos nos dicen que están por la igualdad y la corresponsabilidad, ¿pero qué hacen en la práctica? Esos son los mismos partidos que se siguen negando a arreglar las trampas del RD 6/2019 de reforma de los permisos; trampas que precisamente impiden la corresponsabilidad, como desde la PPIINA venimos denunciando. Si no hacen algo tan fácil como cambiar unas frases en un RDL, ¿por qué vamos a creerles?
Con esta reforma – fiasco han conseguido que la Ley tenga la apariencia de equitativa, ya que cada persona progenitora tiene el mismo permiso de 16 semanas, intransferible y pagado al 100%, tal y como reclamaba la PPIINA. Pero en realidad, tal y como advirtió la PPIINA que sucedería, el 75% de los padres se están tomado todo su permiso simultáneamente con las madres; y de los pocos que se lo toman en varios periodos, muchos lo harán cuando la empresa se lo permita, ya que en esta reforma se ha otorgado a las empresas la potestad de impedir el uso del permiso cuando el bebé y la madre lo necesitan.
¿Cómo es posible que hablen de conciliación corresponsable, de mejorar la vida de las mujeres y, en definitiva, de feminismo, cuando en la práctica impiden que los hombres se queden al cargo de sus bebés durante ese periodo tan decisivo que es su primer año de vida? ¿Cómo es posible que hablen de alargar el permiso de cada progenitor/a hasta 6 meses en lugar de permitir que los hombres utilicen el suyo para turnarse con las mujeres y así alargar casi al doble el permiso total para el bebé?
¿De verdad les preocupa a los gobiernos y a los partidos que las madres no puedan volver a sus puestos de trabajo después de las 16 semanas que ahora dura el permiso total para al menos el 75% de los bebés? ¿De verdad quieren que los hombres sean corresponsables para cambiar esa situación?
No nos creemos las declaraciones de intenciones. Convirtamos este Día de la Madre en un día feminista para exigir los derechos de las madres y de todas las mujeres, de los bebés a recibir cuidados, de los padres a cuidar y de todas las personas a una sociedad igualitaria.